Rosario Arenas, 26 años, soy abogada y corro maratones hace 4 años en Olympic Team. Siempre escojo maratones para el segundo semestre así las entreno en invierno (inviernista de corazón) y Chicago fue mi cuarta maratón.
¿Cuándo decidiste correr tu carrera?
El año pasado tenia muchas ganas de correr un major, postulé a dos de ellas pero no quede, por lo que corrí Buenos Aires. Después de eso volví a probar suerte de nuevo y postulé a Chicago.
¿Cómo te inscribiste?
Al ser un major debes postular a una especie de lotería, donde solo ingresas tus datos con la información de tu tarjeta de crédito y cruzas los dedos ya que lo único que decide si quedas o no es la suerte.
¿Cómo organizaste el viaje: cuántos días antes llegaste, dónde alojaste?Apenas recibí el correo de que había sido seleccionada empecé a buscar alojamiento (abril aprox). Como van tantos corredores (42 mil personas) se llenan muuuy rápido los alojamientos y los precios van subiendo a medida que se va acercando la fecha.
Encontré un dpto en airbnb muy bien ubicado en Gold Coast, que es un barrio que queda justo arriba del sector de la carrera, muy buena ubicación con estaciones de mero cerca, supermercados y tiendas, de hecho estábamos a 25-30 min aprox caminando desde el Millenium Park (donde está el Bean y era el sector de partida de la carrera).
Después de tener el lugar empecé a reunir datos de Chicago, hay una cantidad infinita de cosas para hacer para todos los gustos: miradores, parques, paseos en bote, museos, zoológicos, acuarios, panoramas deportivos etc, y como soy bien matea y no quería fatigar mucho las piernas caminando organicé el viaje para caminar poco los días previos y mas los días posteriores (total la carrera ya estaba hecha jaja).
Llegamos con mi mamá a Chicago el jueves en la mañana, así turisteabamos un poco antes de la carrera, llegábamos con tiempo a la expo y aprovechábamos de disfrutar el ambiente pre carrera que es INCREÍBLE.
¿Qué lugares recomendarías para comer, cómo organizaste tu alimentación?
En el pre carrera los desayunos los hacíamos en el departamento, así sabía perfecto lo que estaba comiendo y en los supermercados de allá hay infinitas opciones. Almorzamos fuera en el “Eataly” (restoran italiano muy recomendable que tiene una tiendita gourmet), en la “Panera Bread” que era comida saludable a muy buen precio y en el sector de Oldtown que hay varios restaurantes muy americanos. Las frutas y snacks pre carrera también los encontré allá sin ningún problema con el asesoramiento a distancia de la Cami, @lanutricami. Post carrera nos dimos el festín de panqueques en The Original Pancake House, Deep Dish Pizza en Giordano’s, cabritas en Garrett Popcorn, hamburguesas en Shake Shack, y un largo etc.
¿Cómo describirías la carrera, organización, hidratación, paisajes u otros?La AME!!!. Desde que pisas Chicago esta toda la ciudad en “modo maratón”, las calles con los letreros, las personas que te atienden, todos te preguntan si es tu primer Chicago, cuanto quieres hacer etc. El retiro de kit en la Expo es enooorme y muy entretenido, es archi reglado así que tienes que mostrar tu pasaporte, te pasan tu chip y retiras tu polera (y si te queda mal puedes pedir sin problemas que te cambien la talla), hay tiendas de todas las marcas de running, todas con sus ediciones especiales de la Chicago Marathon, geles, gomitas, zapatillas, hasta degustación de cervezas.
El día de la carrera está todo súper organizado, ademas de que el metro funciona 24 horas, la misma organización te motiva a llegar en transporte público a la carrera. Cada corredor tiene asignado un color, número de puerta, y corral de encajonamiento, una vez que llegas al parque hay guardias que te revisan tu bolso por temas de seguridad y después debes buscar tu número de puerta para ir a tu guardarropía, así después solo te encajonas. Una de las cosas bacanes de esta carrera (y todos los majors) es que puedes estar abrigado en el encajonamiento y luego tirar la ropa ahí mismo en la calle porque todo lo que se recolecta lo donan.
Como es tanta gente uno se debe encajonar con tiempo esperando a que tu corral parta, lo entretenido es que ahí ves la ansiedad y nerviosismo de toodos los corredores, y te das cuenta que están todos en las mismas que tú. Dan primero la partida de los elite y luego por corrales.
Una vez que empiezas a correr ya te sorprendes porque partes por el centro con los edificios enormes y la calle llena de gente a los costados, con todo tipo de carteles dándote animo como si fueras un rockstar. En algunas calles bajaba un poquito el flujo de gente pero no se notaba, el ambiente es increíble, atraviesas 27 barrios de la ciudad y no te aburres nunca, y en partes que pensabas que ibas tranquila sin viento aparecía la razón del porque le dicen “Windy City” (ciudad del viento).
Hay puestos de hidratación cada 2,5-3k, todos con gatorade y agua y algunos con gomitas, geles y plátanos, están a los dos costados de la calle con muchos voluntarios así se evitan los achoclonamientos. Además mucha gente en la calle te ofrece cosas, desde agua hasta vasitos con mantequilla de maní y mermelada.
Una cosa importante que hay que considerar en esta carrera es que desde antes de llegar a Chicago me habían advertido que el GPS del reloj se perdía bastante, así que decidí anotarme mis parciales en el brazo y fui confiando en el kilometraje que me iba marcando, que después me di cuenta que tampoco funcionó porque el reloj me marco un total de 44,3 km en vez de 42,2. En resumen, y como consejo guíense solo con los letreros de la calle, sus parciales y su cronómetro, a lo oldschool, corran a sensación y disfruten.
¿Qué te sorprendió?
Además de la ciudad en sí misma, la vibra de la gente es impresionante, lo motivados que estaban a pesar del frío que hacía ese día, es lo que te hace disfrutar cada kilómetro de esa carrera, el que te griten sin conocerte, el leer los letreros y motivarte o reírte por las frases que iban apareciendo, etc. La organización es impecable, el clima que nos toco ese día estuvo perfecto (5 grados mínimo, 12 máximo) con un sol que no molestaba. El post race era genial, te daban una lata de cerveza para que la personalizaras con tu tiempo, había música en vivo y stands para poder recuperarte, podías grabar gratis tu medalla en las tiendas de Nike, la gente usaba su medalla de finisher para salir a la calle, a comer, a pasear, la mostraban orgullosos, y no solo el día de la carrera, los díaas posteriores también!!
¿Por qué recomendarías esa carrera?
El sueño de todo maratonista, o al menos el mío, es completar las 6 majors y este definitivamente fue un check en mi lista que con mucho gusto lo dibujé. Además de ser una ciudad increíble para pasear, considero que correr una maratón es la mejor forma de conocer una ciudad, como dicen “recorrer corriendo”, y al ser Chicago tan grande uno no la alcanza a recorrer completa en un par de días y con este recorrido pasas por 27 barrios de la ciudad. El otro pro que tiene, es que es absolutamente plana, teniendo incluso pendiente negativa en algunas zonas lo que la hace perfecta para conseguir tu PB, de la misma forma que yo lo hice 🙂