Un pequeño listado conceptos que no debemos olvidar cuando partimos corriendo, para disfrutar cada uno de nuestros logros, ser felices en cada zancada, disfrutar el proceso y hacernos amigas de los kilómetros.
por Denis Muñoz (@soy_la_deni)
1. Disfruta ser nueva. Cada pequeño progreso. Como cuando uno ve un lugar por primera vez, la primera vez que corras por esa calle que solía ser el camino a la micro, el metro, al súper, etc, esa primera mirada con el sonido de tu respiración agitada por primera vez, no se repetirá. Esa emoción, esas primeras transpiraciones y sensaciones se viven solo cuando se empieza. Atesórenlas cual Gollum al anillo.
2. No tengan miedo. no se van a morir. Todas las que hemos estado ahí conocemos ese ahogo o semiahogo que viene tras emocionarse y correr más rápido, o simplemente correr desde cero, díganse con tranquilidad (mentalmente no para fuera, sino se ahogan más) uno dos, uno, uno dos, uno y rápidamente el cuerpo aprende el ritmo de la inspiración (uno dos) y exhalación (uno) El cuerpo de una corredora aprende súper rápido que es solo otra forma de respirar.
3. Aprecia la curva de aprendizaje y mejora. Cuando una es nueva, todo es logro puede ser desbloqueado, no desperdicien energía comparándose con otros/as, celébrense y disfruten todo lo que van logrando, cada kilómetro extra, es una maravilla.
4. Expriman la avalancha de endorfinas. Sí, duele. Los músculos van a reclamar, pero se van a acostumbrar rápido y ese ‘runner’s high’ como le dice Haruki Murakami (maratonista y gran escritor) abre un hermoso mundo de arcoíris, que puede traer insospechados niveles de disfrute, felicidad y nuevos amigos. Spoiler alert, van a descubrir montones de café y lugares bacanes para tomar desayuno post correr.
5. Está permitido no saber. Pero no está permitido no cuidarse. Pregunta, asesórate. No hay cosa que disfrute más el corredor añoso que compartir, repartir consejos y aprendizajes, así que agarra tu block de notas metal y pon tu cerebro a teclear. Y siempre lee el blog Amigasquecorren
6. No alumbrarse. No jurarse, pero jurarse en secreto. Ser soberbio le queda al Mago Valdivia nomás. Celébrense, disfruten, siéntanse orgullosas, pero no hay cosa más latera e inútil que andar compitiendo. Cliché, pero cierto y sabio: compite y compárate contigo nada más.
7. No creas todo lo que leas o escuches. Asesórate, pero sé criteriosa y una vez más, escucha a tu cuerpo. El cuerpo aprenderá pronto a discriminar el dolor del músculo adaptándose del dolor de una lesión. ¡Ante la duda, abstente! No se dirá suficiente: ¡cuídense! escuchen a su cuerpo y siempre siempre, hidratación y bloqueador.
8. No te apures, eso se guarda para la carrera. No te vas a dar ni cuenta cuando termines tus primeros 5k, luego 10k, 15k… y así. ¡Si te baja la fiebre maratón, hasta los 42k vas a cruzar y vas a pensar ‘guaaa! y al principio ni 5k me podía!’
9. No todo es maratón. Guat? yes. No todo es maratón. Hagan las paces con eso. Quizás hay una distancia para cada corredora, no todos tienen que completar 42 km para graduarse en esto, si te pones zapatillas con relativa frecuencia y sales a golpear tic tac las calles con una sonrisa, ya eres una corredora.
10. Sonríe, lleva tu sudor con orgullo. Jamás jamás olviden porque corremos, porque de distintas formas nos ayuda a ser más felices. Que el personal best no les cague la mente, ni menos aún les dañe sus cuerpitos, que tanto queremos.
¡Disfruten y hágale!