Mi nombre es Carla Schoo-Lastra, tengo 31 años, soy ingeniera comercial y trabajo en empresa como la mayoría de los mortales y hago triatlón en mis tiempos libres. Empecé nadando a los 7 años en la católica y me pasé al triatlón (ahí empecé a correr) a los 24 años (2014).
¿Cuándo decidiste correr tu carrera?
Desde que empecé a hacer triatlón el objetivo fue correr un Ironman, pero como soy competitiva quería estar bien preparada así que dije, una vez que fuera a un mundial medio Ironman me inscribiría en un full , y así fue (me demoré 7 años en eso).
¿ Por qué elegiste esta carrera específica?
Porque según mis amigos que la habían corrido, era una carrera amigable para primera vez en la distancia y sobre todo el maratón era “plano”. Aparte dada la situación pandemia me quedé con Estados Unidos porque es el lugar donde habían más probabilidades de que se hiciera la carrera.
¿Cómo entrenaste?
No fue fácil! Como la mayoría, post encierro estaba con sobrepeso, lejos de mi forma deportiva, pero tenía tanto miedo de no sobrevivir en la carrera (eran por lo menos 11 horas de carrera planificadas) que me puse las pilas con todo en mayo aprox.
El trote siempre fue lo que más me costó y le tenía pánico al maratón así que no me saltaba los trotes, corría aprox 50-60kms semanales aparte de los rodillos, bici y natación. Trataba de irme a Viña los fines de semana para que los largos se me hicieran más cortos porque cada vez era más difícil salir los domingos a esos 25 a 30k
¿Qué medidas tenían con la pandemia? ¿Te sentiste cómoda?
La verdad es que en USA es como si no existiera el Covid-19, era todo igual que antes. Igual fue rico volver a sentir vida normal por unos días!
¿Cuál fue la experiencia en esta carrera? ¿Lo recomendarías?
Fue una experiencia increíble, cruzar la meta es tan emocionante! Independiente del resultado, cuando me quedaba 1km solo pensaba “no puedo creer que corrí un Ironman” y obvio que llegué ahogada en llanto a la meta jajaja. Más que esta carrera en específico, recomiendo ir por ese objetivo que una creía que nunca iba a poder lograr. Va a doler, pero la sensación de lograrlo es impagable.